El acompañamiento a las familias es una tarea urgente por un doble motivo: primero porque las familias cada vez están más aisladas entre sí y, segundo, porque la problemática que la rodea es cada vez más compleja y en ocasiones las familias no cuentan con recursos necesarios para enfrentarse a ella.
Se hace necesario un proceso de acompañamiento que sea capaz de sanar las heridas, resolver los problemas y mirarla con ojos compasivos. Creo que para un eficaz acompañamiento a las familias deben darse las siguientes condiciones:
a) Mirar a la familia como una unidad indiferenciada y completa donde cada uno de sus miembros pueda desarrollarse plenamente.
b) Ser muy sensible a las situaciones de alta vulnerabilidad a las que se puede enfrentar la familia, ellas son las que deben aportar los recursos necesarios para resolver sus problemas.
c) La empatía es la base del acompañamiento a las familias. Empatizar con los miembros más débiles permite que se fortifiquen las relaciones y se cree un clima afectivo donde el diálogo fluya con naturalidad.
d) ACEPTACIÓN INCONDICIONAL, esta es la condición más importante ya que de lo contrario las riñas se convierten en rencillas insalvables y las distancias entre sus miembros en espacios intransitables.
Si somos capaces de tomarnos en serio la problématica familiar habremos dado pasos de gigantes en establecer relaciones de ayuda eficaces.